Caos Vial

Hoy fue uno de esos días caóticos en todos los aspectos. Salí tardísimo de la casa al trabajo, un jefe neurótico, y una cita en la oficina que no recordaba; los reportes pendientes, los sueños guajiros de tener asistente y la enorme necesidad de volverme millonario, es un poco de lo que me sucedió hoy.

Pero ya, al fin llegué a casa, las preocupaciones quedaron allá (los únicos que sí me acompañaron hasta la casa son el sueño guajiro de tener asistente y mi necesidad de volverme millonario)

Hoy esto me hizo el día:

1. Por principio de cuentas, un tráfico de los mil demonios y de los millones de automovilistas que circulamos en esta gran ciudad, trasladarme al sagrado trabajo y encontrarte con un espectacular, que sufría y padecía igual que yo: "o sea hellou!! qué rollo con este tráfico no?"

Bueno, yo no soy tan fresa, pero el espectacular y los demás que transitabamos por allí eramos partícipes del mismo dolor


2. Circular atrás de una camioneta preguntando "y tú, ¿cómo haces feliz a tu pollito?", y recordar que a veces así me dice mi mamá, entonces caí en la triste realidad que mi madre no me hace feliz todavía, porque no me ha dado un asistente para que haga mi chamba, no me ha dado boletos de avión para que viaje. De cualquier forma, yo la quiero mucho aunque no me haya hecho del todo felíz y mañana la festejaré con mucho cariño


3. Leer y sorprenderme en un autolavado que tiene un cargo adicional aspirar el pelo del perro. Yo creo que MasterCard, habría dicho: "Autolavado $30 con master card, armorol $5 con master card, aspirar los pelos ¡¿del perro?!?!? No tiene precio!"


4. Mientras redactaba este "post" recibí la llamada de mi amigo de la infancia Sergio, y platicar un momentito con él

En resumen, a pesar de que fué un día caótico y con presiones, lo logré tomar con filosofía y poder decir que dormiré contento ;)

Un abrazo